29/1/11

¿Investigación Holística o comprensión holística de la investigación?







La comprensión holística de la investigación está llamada a producir cambios insospechados en el campo de la labor científica, en los procesos metodológicos y en la didáctica de la investigación.

Por Jacqueline Hurtado de Barrera

Publicado en: Revista Internacional Magisterio No. 31. Febrero-Marzo 2008. Bogotá, Colombia.

Algunas personas al escuchar la expresión “investigación holística” piensan inmediatamente en un tipo de investigación, en un método, o en un modelo epistémico en particular. Sin embargo, la investigación holística no se refiere realmente a eso. Podría decirse que el adjetivo “holística” más bien hace referencia a una actitud del investigador hacia el proceso de generación del conocimiento. Una actitud de apertura y de búsqueda de una comprensión integradora de su evento de estudio. Por esa razón, más que hablar de investigación holística, sería necesario hablar de “comprensión holística de la investigación”, es decir, de una manera de ver el proceso investigativo que permite percibir en él lo que, a lo largo de los años, los diferentes modelos epistémicos han aportado.

No es un secreto para los investigadores y los docentes que trabajan en el ámbito de la investigación, que desde hace algunos años se ha generado mucha inquietud en relación a la idoneidad de los métodos en investigación y a la necesidad de trascender hacia propuestas más amplias que permitan superar el reduccionismo de algunos modelos y dar respuestas más acordes con la complejidad de las situaciones a estudiar. En esta línea, autores como Cook y Reichardt (1982), Damiani (1995) y Delgado (1991), entre otros, desarrollaron una argumentación convincente en torno a la necesidad de integrar las diferentes técnicas en investigación y superar las confrontaciones entre los denominados “paradigma cualitativo” y “paradigma cuantitativo”. Sin embargo, tal integración se propuso en el plano de las técnicas, más que de los modelos o concepciones del proceso investigativo. En efecto cuando se alude a lo “cualitativo” o a lo “cuantitativo” se hace referencia a técnicas de codificación y de análisis de la información, y no propiamente a posturas filosóficas o a paradigmas. De hecho son varias las posturas filosóficas o los modelos epistémicos que tienen preferencia por el uso de la palabra (y no del número) en los análisis; algunos de ellos son el estructuralismo, el materialismo histórico, la fenomenología y el construccionismo social, aunque estos modelos difieren mucho entre sí en cuanto a su concepción del proceso investigativo, su método, sus criterios de validación y su cosmovisión en general. Lo mismo ocurre con los modelos de investigación que tiene preferencia por el uso de la estadística. En otras palabras, la preferencia por una determinada técnica no es criterio suficiente para incluir diferentes modelos epistémicos en una misma categoría. En consecuencia, el uso o no de estadística en el análisis de los datos, y por ende, la denominación como cuantitativo o cualitativo no nos dice nada acerca de la comprensión del proceso investigativo, de los métodos, de los criterios de validación ni de los resultados de conocimiento que aspira alcanzar cada modelo epistémico.

En este sentido, lo que se denominó investigación holística, pero que más bien alude a una comprensión integradora de la investigación, se propuso generar un modelo del proceso investigativo que recogiera los aportes de los diferentes modelos epistémicos, no sólo desde las técnicas de recolección de datos y de análisis, sino desde la concepción del proceso mismo; un modelo que abriera el panorama en cuanto a las posibilidades de aplicación de procedimientos, de variedad de resultados y de tipos de investigación y que fuese aplicable tanto a las ciencias sociales como a las ciencias naturales. En otras palabras generar un modelo en el cual se pudiera apreciar la enteridad del proceso investigativo (holos significa entero, completo, integro).

La comprensión holística de la investigación, tal como se plantea en este artículo, comenzó a desarrollarse a partir del año 1995, en el contexto de la Fundación Sypal (Servicios y proyecciones para América Latina), en Caracas, a partir de las inquietudes formuladas por múltiples investigadores con respecto a la rigidez y limitación de las formas tradicionales de hacer ciencia, enmarcadas en un único paradigma. Esta manera de entender la investigación tiene su asiento en la holística como corriente filosófica y en los desarrollos de la física cuántica. Aunque la holística tiene sus raíces los planteamientos de Aristóteles, quien fue el primero en afirmar que el todo es más que la suma de las partes, se moldea como corriente filosófica mucho después.

En su origen y concepción, cada modelo epistémico enfatizó ciertos aspectos del proceso de investigación en detrimento de otros. Por ejemplo, el positivismo destacó la importancia de verificar y descalificó la descripción como tipo de investigación, mientras que la fenomenología rescató la importancia de la descripción, pero desdeñó la verificación. Algunos métodos como la investigación-acción dieron mayor importancia a la participación de los investigados, mientras que otros privilegiaron las decisiones del investigador. Desde una comprensión holística de la investigación es posible comprender que todos esos aspectos son importantes, y que no sólo pueden coexistir en un modelo integrador, sino que son necesarios. En el gráfico 1 se aprecian los aspectos básicos que cada modelo epistémico aporta al proceso investigativo.

Figura 1. Sintagma de las definiciones de investigación

Hacia un modelo integrador a partir de los principios de la holística

Como antecedentes de la holística, se pueden citar los planteamientos de algunos autores, como Capra (1994), Weil (1993), Bohm (1980), Wilber, Pribram (1992), y otros autores que apuntan hacia una concepción holística de la ciencia. La comprensión holística de la investigación es una propuesta que presenta la investigación como un proceso global, evolutivo, integrador, concatenado y organizado. Desde una comprensión holística es posible trabajar los procesos que tienen que ver con la invención, con la formulación de propuestas novedosas, con la descripción y la clasificación, la creación de teorías y modelos, la indagación acerca del futuro, la aplicación práctica de soluciones, y la evaluación de proyectos, programas y acciones sociales, entre otras cosas.

Algunos de los principios de la holística que permiten visualizar un modelo integrador del proceso investigativo, son los siguientes:

- El principio de la unidad del todo.

- El principio de simultaneidad y sincronicidad.

- El principio de integralidad.

- El principio de posibilidades abiertas.

- El principio de complementariedad.

- El principio de devenir.

El principio de la unidad del todo

Cada vez más teóricos e investigadores coinciden en la idea de que el universo es una totalidad y que todo en él está íntimamente relacionado. Esta afirmación se basa, entre otras cosas, en los descubrimientos de la física cuántica. Al respecto, Capra (1992) expresa que la interconexión universal de las cosas y de los sucesos parece ser un rasgo fundamental de la realidad atómica. Bohm (c. p. Capra, 1992) confirma ésto al decir, en relación a la física cuántica: “uno llega a un nuevo concepto de inquebrantable totalidad que niega la idea clásica del mundo en partes existentes por separado e independientes” (p.156).

El principio de la unidad del todo deriva en ciertas consecuencias o aplicaciones en lo que respecta al proceso metodológico en la investigación holística. La investigación es vista como un proceso continuo que intenta abordar una totalidad o un holos (no el “absoluto” ni “el todo”) para llegar a un cierto conocimiento de él. En este sentido, el proceso investigativo abarca aspectos tanto secuenciales como simultáneos y continuidad no debe ser entendida como “acumulación” o como “linealidad”. Por ejemplo, el proceso de selección y análisis de un tema, en una investigación cualquiera, implica una serie de acciones que se ejecutan conjuntamente, de manera integrada: se lee, pero al mismo tiempo se observa, se reflexiona, se formulan interrogantes que van cambiando a medida que la lectura... esto también ocurre en otras etapas de la investigación

Para la holística, el universo es una sola realidad, de modo que los límites son considerados abstracciones del ser humano que le permiten aproximarse al conocimiento, al focalizar su atención en un evento específico de su interés. Es el investigador quien crea una frontera o un “límite” para poder aproximarse al estudio. Cuando el investigador presupone que las fronteras son reales y cree que es el medio externo el que determina los límites del evento a investigar, suele demorarse mucho en delimitar el tema y sus alcances, pues se queda esperando que el tema o la pregunta emerjan solos del contexto.

El principio simultaneidad y sincronicidad

El principio de sincronicidad está asociado con Jung (1952), y plantea que existe una forma de conexión entre fenómenos o situaciones de la realidad que se enlazan de manera a-causal, no lineal, de modo que tal conexión no responde a la lógica de la causa-efecto. Jung, concibió el principio de sincronicidad para describir la singular ocurrencia de dos o más acontecimientos de igual o similar significación, sin conexión causal posible. Este autor define la sincronicidad como: “La manifestación de una coincidencia significativa, de una conexión acausal” (Jung c.p. Luis, 2007).

Una de las implicaciones filosóficas del principio de sincronicidad es que éste constituye un vínculo entre el mundo psíquico y el mundo material, entre observador y observado, y por tanto introduce un principio de unidad entre el investigador y lo que se investiga. En la antigua concepción de ciencia se creía que las descripciones científicas eran “objetivas” e “independientes” del observador humano y del proceso de conocimiento, pero esta manera de pensar ha cambiado. El planteamiento de la unidad entre observador y observado tiene además su apoyo en el principio de indeterminación de Heisenberg, mencionado anteriormente: cuando se trata de medir con precisión los valores de un evento, los otros valores se vuelven inciertos. En consecuencia, “las propiedades de los objetos no se pueden separar del acto de medición y, por ende, del observador mismo” (Briggs y Peat, 1996).

El principio de integralidad

La integralidad le recuerda al investigador que si bien el universo es una unidad, no es uniforme, sino complejo. La integralidad alude a la unidad en lo diverso, por lo tanto la holística dista mucho de ser una forma de monismo. El ser humano es también un ser integral, que si bien es uno, se manifiesta desde diversas dimensiones (biofisiológica, volitiva, cognitiva, ética). Al estar la investigación signada por el humano, pues se debe a lo humano, es su principio y fin, debe tenerse en cuenta que:

- La investigación es una experiencia de integralidad.

- La investigación se da en un contexto social.

- La investigación tiene un carácter histórico.

- La investigación está inmersa en un sistema de valores.

Este principio se manifiesta en el proceso investigativo en las múltiples fuentes de las cuales procede el conocimiento: la experiencia, la observación, la imaginación, la reflexión, la intuición... Tiempo atrás se enfatizaba el carácter racional de la ciencia, así como el sentido instrumental y práctico de la misma, pero la ciencia no sólo es un proceso meramente intelectivo generado sólo a partir de las funciones del hemisferio izquierdo (lógico, analítico y secuencial), sino un proceso integrador. Es todo el cerebro el que participa, Aún más, no sólo es cerebral: es integral, integrativo y holístico. El investigador asume su trabajo a partir de su complejidad de ser humano e integra valores, emociones, actitudes, pensamientos, intuiciones y todo aquello que forma parte de él como persona.

El principio de posibilidades abiertas: caología y cosmología

El principio de posibilidades abiertas tiene su origen en la ciencia del siglo XX. Prigogine (2005) se dedicó a profundizar en los fenómenos de la termodinámica, y a partir de allí desarrolló sus planteamientos en torno a los conceptos de disipación de la energía, la irreversibilidad y la progresión hacia el desorden, así como la relación de éstos con el no equilibrio. La extensión del principio de posibilidades abiertas en la investigación se manifiesta en lo siguiente:

- El carácter creativo y no rutinario de la investigación, aún en el uso de los métodos: El proceso investigativo no puede ser una receta. Si bien es cierto que los métodos de investigación orientan sobre los caminos a seguir, esos caminos pueden estar llenos de sorpresas. Un proceso investigativo dinámico, abierto y creativo no puede estar limitado a una única técnica o a un método reduccionista, requiere variedad de posibilidades, de técnicas y de instrumentos acordes con las múltiples situaciones que se pueden presentar a lo largo de la indagación.

- La complementariedad entre el abordaje caológico y el abordaje cosmológico de la investigación: Para Prigogine los elementos creadores del orden y los creadores del desorden siempre están ligados, de modo que orden y desorden aparecen a la vez. Así como los procesos lineales en la física son predecibles y los sistemas cerrados son poco sensibles a las variaciones externas, en investigación el abordaje cosmológico (estructuado, cerrado, prestablecido, orientado a corroborar) responde a un camino relativamente preestablecido, con criterios más precisos y orientaciones más restringidas y es menos sensible a las variaciones que se apartan de los criterios y conceptos previos del investigador; este abordaje fue el preferido del positivismo. De la misma forma como los procesos disipativos en la física son complejos, no lineales e impredecibles, el abordaje caológico en investigación (inestructurado, abierto, con un mínimo de criterios previos, orientado a descubrir) se inicia sin preguntas, sin instrumentos estructurados, sin hipótesis, sólo con una actitud de escucha y apertura por parte del investigador, de modo que hasta los mismos eventos de estudio van emergiendo en el proceso; este tipo de abordaje ha sido el preferido del estructuralismo y de la fenomenología.

Figura 2. Abordajes caológico y cosmológico


El principio de complementariedad y los sintagmas

El principio de complementariedad fue enunciado inicialmente por Bohr con el propósito de interpretar las relaciones de incertidumbre de Heisenberg. En la física cuántica este principio plantea que en el mundo atómico no hay ondas ni corpúsculos como tales, sino que toda manifestación de la luz muestra un aspecto corpuscular, un aspecto ondulatorio o una combinación de ambos. Bohr sugirió que el principio de complementariedad podría extenderse a todas las áreas del conocimiento y sostuvo que los diferentes enfoques o teorías pertenecientes a una misma disciplina eran complementarios.

Esta complementariedad dió lugar al concepto de sintagma dentro de la comprensión holística de la investigación. Dado que los diferentes paradigmas proporcionan nociones de aspectos diferentes de un mismo evento, el sintagma sería una percepción amplia de un evento visto desde varios puntos de vista. El sintagma constituye, entonces, una comprensión mayor en la cual puede percibirse el evento como totalidad, en lugar de percibirlo desde una única perspectiva. Los diferentes modelos epistémicos en investigación se consideran como maneras distintas de percibir la misma realidad, es decir, aspectos complementarios del proceso investigativo global, y la comprensión holística presenta un sintagma de esos modelos.

El principio del devenir y la espiral holística

Desde los planteamientos de Heráclito en la filosofía antigua, hasta los desarrollos de Hawking con su teoría sobre la expansión del universo y las propuestas subsiguientes, el ser humano ha percibido el cambio como parte de la vida y del universo. El principio del devenir plantea que todo cambia permanentemente, por tanto, el conocimiento también es cambiante, y la investigación es un proceso de devenir personal e histórico. La ciencia de los antiguos paradigmas creía en la existencia de una teoría científica última acerca del mundo como una construcción firme y permanente. Pero cada día los científicos se convencen más de que esto no es posible. La búsqueda de conocimiento es un proceso dinámico, en el cual lo que se puede aceptar como verdad en una época, se considera insuficiente o se percibe como inadecuado en otra.

Desde una visión integradora se concibe el proceso investigativo como un devenir a través de diferentes niveles de conocimiento. En este devenir, el conocimiento anterior no queda desechado completamente, sino que se integra dentro de una nueva comprensión, pues ha sido la tarea evolutiva necesaria para alcanzar el nuevo aprendizaje. Desde una comprensión holística el ser humano se aproxima al conocimiento en un proceso permanente en “espiral” donde cada resultado alcanza grados de complejidad cada vez más avanzados. La espiral holística recorre diez tipos de investigación que se repiten ad infinitum, como un fractal.

Figura 3. La espiral de la investigación

Cada vuelta de la espiral representa un estadio de conocimiento y un objetivo de investigación. Estos objetivos representan logros sucesivos en un proceso permanente de generación de conocimiento, más que resultados finales. Los objetivos son integradores: para plantearse un objetivo de mayor profundi­dad se requiere antes haber logrado objetivos de menor profundidad o complejidad. Hay diez categorías básicas de objetivos: explorar, describir, analizar, comparar, explicar, predecir, proponer, intervenir, confirmar y evaluar, los cuales conducen, cada uno, a un tipo de investigación diferente: exploratoria, descriptiva, analítica, comparativa, explicativa, predictiva, proyectiva, interactiva, confirmatoria y evaluativa.

Exigencias y aportes de una comprensión holística de la investigación

Para trabajar con la comprensión holística de la investigación es esencial conocer y manejar los aportes y propuestas de los diferentes paradigmas e n investigación y además conocer multiplicidad de técnicas y métodos, pero fundamentalmente se requiere una actitud de apertura, flexibilidad y creatividad.

Por otra parte, la comprensión holística de la investigación proporciona diversos aportes, tanto metodológicos como pedagógicos, sociales y humanos. En primer lugar, constituye un modelo que organiza y sistematiza la información y el conocimiento en metodología de investigación por medio de la metáfora de la “espiral holística” (Hurtado de Barrera, 1996, 2000) y del cual se desprende la propuesta metodológica. Con base en este modelo se configuran la escala integrativa de los objetivos, los conceptos de fases y estadios y la concatenación de los tipos de investigación como momentos de un proceso único.

El modelo ha permitido desarrollar una clasificación amplia de los tipos de investigación en la cual se conceptualizan diez categorías (cuando los autores metodológicos más antiguos sólo habían conceptualizado una, y los más recientes a lo sumo cuatro). En investigación holística todos los tipos de investigación son importantes y ninguno es superior a otro: todos se necesitan recíprocamente. Se le atribuye significación científica, tanto a una investigación descriptiva como a una investigación explicativa o proyectiva, y se evita hacer corresponder los tipos con niveles específicos del proceso educativo formal.

Otro aporte consiste en la posibilidad de hacer investigación de manera transdisciplinaria. Esto es muy importante, pues tal como lo plantean Capra y Steindl-Rast (1994), en terrenos de la ciencia, cada campo científico con relevancia social es requerido en estos momentos de la historia para la solución de graves problemas de la sociedad y sólo una ciencia orientada hacia la holística será capaz de resolverlos, pues no cabe entender aisladamente los problemas principales de la época. Sea cual fuere el problema a resolver, tiene que ser percibido en su relación con los demás problemas, y para ello se precisa de un pensamiento holístico.

Otra contribución es el concepto de sintagma gnoseológico como una vía para desarrollar nuevo pensamiento y escapar de las viejas y gastadas ideas asociadas con el marco teórico basado en teorías ajenas a la realidad del investigador (Hurtado de Barrera, 1998, 2001a). La posibilidad de generar sintagmas propios invita al investigador a desprenderse del “copia y pega” para generar sus propios conceptos y desarrollar reflexiones teóricas más profundas.

La comprensión holística de la investigación abre una ventana novedosa que motiva y estimula a dar aportes propios y universales y ayuda al investigador a compren­der las distintas fases y estadios por los que atraviesan los procesos creativos en el plano de la investigación.

Además, la comprensión holística de la investigación propicia una mayor trascendencia de lo científico a otras áreas de lo humano y lo social. Para la comprensión holística de la investigación queda superada la división tradicional en­tre ciencia formal y ciencia fáctica. Esta característica de la comprensión holística de la investigación también facilita que docentes de cualquier nivel educativo y de cualquier disciplina puedan incorporar procesos investigativos a las actividades didácticas.

Dentro de esta propuesta no hay disociación entre la investigación y el quehacer profesional. Un tema de investigación nace fundamental­mente de un contexto y obedece a una necesidad, y se buscan resultados aplicables, capaces de resolver esas necesidades. Esta antigua dicotomía entre ciencia fáctica y ciencia teórica puede entenderse ahora como la expresión de diferentes mo­mentos de la espiral holística.

En síntesis, la comprensión holística de la investigación da respuesta a muchas de las inquietudes de investigadores e intelectuales. Diversos teóricos habían hecho las acotaciones epistémicas en torno a lo que se requería como proceso investigativo, pero no se había formulado un desarrollo metodológico que expresara esas inquietudes: ¿Cómo hacer ciencia a partir de esos principios epistémicos?, ¿cómo incorporar los procesos de simultaneidad a la investigación?, ¿cómo aplicar el proceso sintagmático?, ¿cómo hacer investigación transdisciplinaria?, ¿cómo hacer una investigación más humana? Estas preguntas son las que responde la investigación holística.

Referencias

Bohm, David. 1980. La totalidad y el orden implicado. Barcelona, España: Kairós.

Capra, Fritjof; Steindl-Rast, David. 1994. Pertenecer al Universo. Encuentros entre Ciencia y Espiritualidad. Madrid, España: Edaf.

Brogs, J. y Peat, D. 1996. A través del maravilloso espejo del universo. Barcelona, España: Gedisa.

Cook, T.D.; Reichardt, Ch. 1982 Métodos cualitativos y cuantitativos en investigación evaluativa. Madrid, España: Morata.

Damiani, Luis F. 1996. La diversidad metodológica en la Sociología. Caracas, Venezuela: Fondo Editorial Tropykos.

Delgado, José María. 1991. "Algunas consideraciones en torno al debate entre los enfoques cuantitativo y cualitativo de investigación en las ciencias sociales". Revista Paradigma. Vol. XIII. Nos. 1 y 2. Caracas, Venezuela: UPEL.

Hurtado de Barrera, Jacqueline. 2007. Metodología de la investigación. Una comprensión holística. Caracas, Venezuela. Ediciones Quirón- Sypal. Caracas.

Jung, Carl Gustav. 2004. Sincronicidad como principio de conexiones acausales (1952). Obra completa Volumen 8: La Dinámica de lo Inconsciente. Madrid: Trotta

Prigogine, Ilya. 2005. El nacimiento del tiempo. España: TusQuets Editores.

Weil, Pierre. 1993. Holística, una nueva visión y abordaje de lo real. Bogotá, Colombia: Ediciones San Pablo.

Wilber, Ken y otros. 1992. El paradigma holográfico. Una exploración de las fronteras de la ciencia. Buenos Aires, Argentina: Kairós.

4 comentarios:

  1. Buenos días prof. Jacqueline, me gustaría mucho saber cómo puedo acceder a la compra de sus materiales.
    Yo soy profesor universitario del Paraguay y desde hace algunos años he venido siguiendo su perspectiva desde Internet.
    Muchas gracias y saludos cordiales

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  2. Excelente Jacqueline, soy investigador y desearía comprar su libro, ¿como lo haría? Agradezco me informe sobre el evento del Sypal que se va a realizar en Maracay los días 15 y 16 de abril del 2011, si es posible me enviés por e-mail el afiche que lo promociona. Mi e-mail es: jmaldonadoupel@hotmail.com
    Gracias, Jorge Maldonado.

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  3. Saludos desde Valencia, profesora Hurtado. Actualmente estoy emprendiendo una investigación que hasta ahora la defino como cualitativa, documental, descriptiva y comparada. Me preguntada si estoy mezclando muchos términos en la investigación? pienso que quizás con solo hacerla de manera cualitativa, documental y comparada es suficiente. Ya al hacerla comparativa podría omitir colocar que es descriptiva?
    Espero tengo unos minutos para ayudarme en este enredo, sería un honor contar con su valiosa ayuda.
    Le dejo mi correo: pamelamendibleortiz@gmail.com

    Éxitos, salud y bendiciones para usted.

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  4. Saludos cordiales desde Tarapoto en Perú, profesora Hurtado. Estoy siguiendo por el internet vuestra metodología, puesto que en los últimos meses llevo preparando mi proyecto de tesis para optar por el titulo de arquitecto, por lo tanto estoy muy interesado en adquirir vuestro material, me es muy importante obtenerlo. Por favor si es posible que me indique una forma de obtener sus libros, le dejo mi correo: j4.arq@hotmail.com estaré muy agradecido. Bendiciones.

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